8 de junio de 2015

La decisión triste y justa


Entenderás o no entenderás.

Terminan de darme la anacrónica novedad. Mi hija, Mía Antonella, junto a otro alumno de la sala, ha sido elegida por los directivos del colegio, por mérito propio y ganado, para representar a los alumnos de 4to. grado para recibir el diploma de la jura de la bandera de manos del Intendente, cuando ya he invalidado la ceremonia del año anterior, porque la jura también la tomó don Fernando Espinoza, porque el Reglamento de enseñanza dice claramente que la jura debe tomarla la "máxima autoridad educativa". Este año, sin duda, repetirá el atropello del reglamento, como aventuran las autoridades educativas del establecimiento. Dicha tarea, en nuestro distrito, le corresponde a la Sra. Silvia Francese, Secretaria de Cultura y Educación, y esa tarea no puede ser delegada por conveniencia ni tomada por escalafón partidiario ni político o de publicidad. La jura tomada por Espinoza no tiene ningún valor sino para la foto en un año electoral donde todos son tomados como rehenes de campaña. 

Pero yo tampoco tomo rehenes, mi hija no será otro "Autor de La Matanza en la Feria del Libro" funcional con el gobierno para la foto y luego el empujón del escenario. Es otro "25 de Mayo con choris y escarapelas de La Cámpora", excepto que esta vez afecta a uno de los míos. Pero no mudaré de ropa. No puedo digerirlo ni con dos tachos de Buscapina. No sé que propondrán los directivos como alternativa, pero lo siento mucho... lo siento. Lo siento.

CR