por el periódico del oeste Noticias Merlo.
"Noticias
Merlo conversó con el narrador y ensayista, Carlos Rigel, quien es la piedra
fundamental de los artistas que componen el Café Literario y Autores de
Merlo, para contar de que se trata el Primer Encuentro de Letras y Café
Literario que se llevará a cabo el jueves 15 de diciembre de 18 a 22 hs. en
la calle Perú 842, entre Libertad y Jujuy, Merlo Centro. Esta mesa libre de
exposición se creo en julio de 2015 y hoy es un espacio para todos aquellos interesados en poemas, prosas y
experiencias creativas a micrófono abierto.
¿De qué
se trata la iniciativa Autores de Merlo?
La
propuesta viene elaborándose desde hace varios meses, diría que de antes del
cambio de gobierno, con un vecino de Merlo que es un lector compulsivo y
reflexivo de mi obra, Mariano Mateo Iaciancio, quien me visita con frecuencia
siendo yo expositor y autor del oeste en las ferias de libros, pero la
necesidad es de reunir a los autores locales, brindarles un espacio de
expresión en libertad y, más allá de lo promisorio, también, permitir el
encuentro de autores maduros con obra publicada y años de trabajo solitario
–que sabemos que la comuna los tiene–, con los simpatizantes de la escritura en
sus primeras letras. Creemos
que el lanzamiento de los cafés literarios irá cobrando dimensión cultural para
el lanzamiento de los talleres de escritura y literatura en Merlo el año que
viene.
Inician
actividades con un café literario, ¿por qué?
Los cafés
literarios o tertulias tienen su historia. La costumbre tiene origen en la
Europa de Diderot, de Voltaire y Rousseau. El primer café fue Le Procope en el
siglo XVII. Años después, París contaba con unos diez cafés literarios. Y un
siglo más tarde, contaba con novecientos. Sin duda que nuestros próceres,
durante las visitas al Viejo Mundo, asistían a esos encuentros cuya influencia
llegó a nuestras costas al mismo tiempo que las corrientes emancipadoras
americanas. Y quizá por ella misma. Pero lo menciono sólo para dar una idea de
la importancia que revisten estas costumbres en una sociedad madura y creciente.
Pero aquí
también tuvimos lo nuestro en los orígenes de la patria con las tertulias
literarias del Grupo de Mayo a comienzos del siglo XIX, en la antigua Buenos
Aires, donde prosperaba el salón literario que dirigía Marcos Sastre. Allí,
Esteban Echeverría leyó sus poemas y años después destacaba como coordinador de
reuniones en debates políticos progresistas y literarios junto a figuras de la
talla de Alberdi, Juan María Gutiérrez y el mismo Sastre. La intensa
creatividad de la generación del ’90 no fue espontánea sino previsible de un
linaje patrón iniciado en esos cafés.
Pero
volviendo a tu pregunta, el evento es
la apertura de un programa sólido de actividades artísticas y culturales para
la gente de Merlo, y que contará, además, con ciclos de conferencias,
presentaciones de autores invitados y exposiciones de arte local.
¿Cómo
nació Autores de Merlo y qué fines tiene?
La
primera reunión formal fue durante el cumpleaños de Mariano Iaciancio en la
casa de Adriana Schmall, otra vecina de Merlo, y esa noche conocí a varios
autores, entre ellos, a Marcelo Laitte, a Gustavo Herrera y a Gerardo García, y
otros cuyos nombres ahora escapan a mi memoria, pero entre aperitivos fuimos
analizamos diversos temas que hacían a la apertura cultural de Merlo como
factor de desarrollo complementario con la educación y la promoción de las
artes. Hubo, a partir de esa noche, impulsos solitarios y aislados para
capitalizar esa corriente emergente, pero creemos que lo mejor es desoír los
protagonismos centrales que buscan rédito político en favor de servir a la
comunidad para el desarrollo de su gente. Pero mucho antes de esa fiesta, desde
2013, veníamos reuniéndonos con Mariano, explorando las alternativas.
La
experiencia hecha en La Matanza fue valiosa desde que algunos audaces pedimos
un stand precario para Autores de Matanza en la feria de artesanías en una
plaza pública. Había artesanos de collares, de ropa, de comidas tradicionales,
y también un stand de libros de autores locales, donde los poetas y narradores
de barrios cercanos conversaban con los vecinos de paso por la plaza, además de
venderles sus libros. Enfrentar un libro con el lector es toda una
experiencia, pero ligar al lector con el autor del libro que está comprando, es
inolvidable, además de la antesala para las ferias de libros municipales,
gimnasia que cada autor debe experimentar para abrirse camino.
En cuanto
a la segunda parte de tu pregunta, el crecimiento de un autor atraviesa
varias etapas hasta definir un estilo que lo distingue como una marca. Todas
ellas pueden lograrse, y se logran a menudo, en soledad, pero si hay una guía
orientativa es mucho mejor y más rápido alcanzar la madurez de la palabra
escrita. Tanto los cafés literarios como los talleres de escritura, comulgan al
autor con la gente. Los autores leen sus trabajos, conocen las opiniones de sus
iguales, debaten, pulen sus escritos, mejoran el perfil propio. Cada autor debe
construir su propio público seguidor. Podemos darles herramientas que refinan
el estilo, pautas analíticas y de recursos intratextuales, incluso sentarlos al
micrófono, pero cada autor debe hacer su experiencia individual, y es
responsable de hacer crecer sus lectores. Es como la comunidad de amigos
seguidores en las redes sociales… sólo que aquí al público hay que seducirlo
con el escrito para que sea su lector.
¿Quiénes
componen Autores de Merlo?
Hasta el
momento, se trata de una comunidad en formación. Cuenta con unos pocos
narradores, columnistas y pocos poetas pero con muchos lectores, ya que los
leyentes también componen esta comunidad de afectos con el libro y la lectura,
pero creemos que la propuesta irá difundiéndose y muy pronto podremos realizar
una nómina de miembros a través de un registro de visitas en cada evento;
prioriza mantener el contacto abierto con todos ellos a través de las redes
sociales en favor del intercambio y el anuncio de eventos, aprovechando las
virtudes de internet.
La
observación es que en otros distritos también se organizaron estos grupos de
autores y siempre fue impulsor para el acercamiento de miembros de otras
corrientes del arte, como escultores, pintores, fotógrafos, etcétera. Así
descubrimos el enorme potencial cultural y humano con que cuenta cada distrito.
De pronto descubrís que tenés a un dramaturgo reconocido y homenajeado por
artistas de prestigio del orden nacional, y lo tenés perdido e inactivo en un
barrio distante de Merlo.
¿Y
quiénes pueden formar parte?
Todos, incluso el público no leyente y,
claro, poetas, narradores, ensayistas, incluso periodistas de hojas barriales,
la idea es conocer los atributos culturales de los vecinos de Merlo y, a esa
plusvalía social, abrirles los espacios de expresión, de lectura, de promoción
de sus obras, de debate y de sinergia. La Merlo creativa adeuda al
territorio provincial y nacional, precisamente, ese valor agregado de
experiencia construida a través de años de labor solitaria. Hace pocas semanas
fallecía una figura destacada de Merlo casi en completo anonimato, el músico y
filósofo José Luis Ferreira, quien fue el maestro de Gustavo Cerati, y a quien
tuve el honor de conocer y de visitarlo en su casa aquí, a pocas cuadras de la
Estación Merlo. Hay figuras que reúnen 30 o 40 años, o incluso más, de labor,
es tiempo del reconocimiento de esas personalidades y permitirles honrarnos con
su arte, además de compartir esa labor con los artistas jóvenes emergentes y el
público en general. Es un mandato social que quien sabe o aprendió algo, no lo
adquiere para sí mismo con hedonismo egoísta, sino para compartirlo y
multiplicarlo con sus iguales. Sólo así las sociedades progresan. Imaginemos
que Platón hubiera muerto sin discípulos, por ejemplo, sin Aristóteles…"